¡El Amor es Extravagante!

Las lenguas,  la profecía, el conocimiento, la fe absoluta, la filantropía, el martirio sin el amor de Dios en Cristo se traduce en nada,  un cero absoluto.

Vuelva y lea otra vez el mayor ensayo alguna vez escrito sobre el amor. Primera Corintios 13 siempre me recuerda la más alta prioridad en la vida del Cristiano. "Y ahora permanecen la fe, la esperanza,  y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor" (1 Cor. 13:13).

¿Por qué es este capítulo tan importante para el crecimiento Cristiano? Es un asombroso retrato de Jesucristo. Lea a través de este capítulo  otra vez sustituyendo el nombre de Jesucristo en lugar de la palabra "amor" o "compasión" Esto es el maravilloso retrato de Cristo que modela para nosotros el amor perfecto.

El amor es paciente (1 Cor. 13:4).

El amor es duradero. Su gracia se extiende incluso en los momentos más acalorados en la vida. Cuando nuestros nervios están crispados no hay que perder los estribos. No es fácilmente frustrado y de mal genio. El amor de Dios ve en nosotros más allá de las circunstancias y considera  a todas las personas involucradas. Cristo fue extremadamente paciente con Sus discípulos y con los que fueron alumnos espiritualmente lentos (Lucas 24:35). Él sigue siendo paciente, no queriendo que ninguno perezca (2 Pedro 3:9).  ¿Somos pacientes con los que son lentos para creer en Él? El amor Cristiano maduro es consistentemente lento para perder la paciencia. Tarda mucho tiempo antes de echar humo y romper en llamas.

El amor es benigno (1 Cor. 13:4b)

El amor busca la manera de ser útil y demuestra una amable bondad a otros. Busca lo mejor en otros, y  vence las actitudes y los comportamientos egoístas. Cuando somos amables unos a otros, compasivos,  perdonándonos unos a otros, nosotros estamos siendo igual que Dios en Cristo que nos ha perdonado (Efesios 4:32, 2 Tim. 2:24; Gál. 6:1).

El amor  no tiene envidia (1 Cor. 13:4c)

El amor nunca es envidioso y no  pierde el control por encima de los celos. El amor demuestra una actitud de satisfacción con lo que Dios ha previsto para el individuo. Vence la envidia y los celos (1 Cor. 10:23-24; 2 Cor. 12:19-21).

El amor acepta a los demás (1 Cor. 13:4d)

El amor no es jactancioso, arrogante, presumido, ni tampoco busca vanagloria. No es altivo y no está deseoso de impresionar. El amor es una actitud de aceptación de otras personas, dones, habilidades, talentos, e incluso sus debilidades. No es arrogante y no se jacta. Este no resopla en sí  mismo levantando el orgullo exagerado (1 Cor. 4:6; 8:1, Rom. 14:19; 15:1-2; Col. 3:8-10).

El amor no hace nada indebido  (1 Cor. 13:5a.)

"No actúa impropiamente", indecentemente o de una manera vergonzosa. No actúa con rudeza, pero elige la palabra correcta y la expresa de la manera correcta en el momento adecuado. Este no hace el esquema y el juego "Yo soy mejor que usted." Este no desarrolla una intensa actitud crítica y actúa impropiamente hacia otros que no están a la altura de sus normas (Efesios 4:29-32). No hace nada que pueda causar que uno se sonroje.

El amor es desinteresado (1 Cor. 13:5b).

El amor de Dios no es egoísta y no busca por números uno (Efesios 4:17-20). No busca sus propios derechos y nunca es interesado. No persigue fines egoístas. "El Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos" (Mateo 20:28).

El amor perdona (1 Cor. 13:5c)

No hay nada más refrescante para el alma que tener un sentido de ser perdonado por Dios y  por otros. El amor no se apresura a ofender y busca la reconciliación. No lleva la cuenta de los agravios  hechos por otros (2 Cor. 5:19; Rom. 4:8).  El tipo de amor de Dios es perdonar. No guarda rencores y "nunca es provocado", y "no tiene en cuenta un agravio sufrido." El perdón es el modelo para nosotros perfectamente en el amor de Cristo (Lucas 23:34; 1 Pedro 4:8; Mat. 18:21-22; 11:27-30). Él nunca se ofendía fácilmente,  no era  irritable o resentido. Jesús no almaceno el resentimiento y no llevo ninguna maldad hacia otros.

El amor edifica (1 Cor. 13:6a).

El amor construye en otras personas y las hace lucir bien. El amor no encuentra ningún placer en la búsqueda de maldad en otros. Este edifica y dice que tú eres importante en el Reino de Dios. "No se regocija en la injusticia." Se alegra cuando ve la justicia de Dios triunfar. Nunca se alegra cuando se hace mal. Este fue el ejemplo de Jesús en Juan 8:1-11; Juan 4, etc.

El amor se goza en la verdad (1 Cor. 13:6b)

La clase de amor de Dios le da a otros la libertad para decir la verdad (Efesios 4:25-27). El amor siempre se alegra cuando la verdad triunfa.

El amor protege (1 Cor. 13:7a)

El amor protege por creer lo mejor en los demás. La clase de amor de Dios cubre multitud de pecados y cubre, protege, y protege a las personas a causa de las heridas en la vida. Es siempre deseoso de buscar lo mejor en otros. Este " soporta todas las cosas" como la cubierta de una azotea (1 Cor. 9:12). El amor levanta la carga bajo cualquier cosa y todo lo que viene.

El amor confía en Dios en todas las circunstancias (1 Cor. 13:7b)

El amor cree en Dios y en su soberanía en todo y bajo todas las circunstancias. Ejerce la fe en todo, y no hay nada que no puede afrontar. Hace que el cristiano les dé a otros la ventaja de la duda, y demuestra su confianza en Dios.  El amor "considera todas las cosas, espera las cosas, aguanta todas las cosas", ya que apunta  a toda la sabiduría soberana de Dios. Las profecías, las lenguas, los conocimientos todos tienen su propósito y será abolido a tiempo. Pero "el amor nunca falla" (1 Cor. 13:8).

¿Cómo Dios produce este tipo de amor en el Cristiano? Comienza con la confianza en Él y de Su gracia de salvación. Todo lo que Él necesita es la voluntad de que te hagas disponible para él. Permitirle instalarse y que él se haga disponible en tu corazón. Así como tú te sientes en casa en Él, Él reproduce Su amor dentro de  ti,  entonces cambian tus actitudes, tus acciones y tus comportamientos.

¿Quieres amar con este tipo de amor? Esto es lo que tú necesitas, tu familia necesita, y aquellos con quienes te relacionas diariamente.

Este tipo de amor nunca se desvanece y todo lo soporta.

Selah!

Mensaje por Wil Pounds (c) 2009 traducido por Katia Blandin