¿Cuál es su actitud hacia  la oración sin contestar? ¿Qué es lo que  piensa que Dios está tratando de enseñarle cuando Él decide no contestar sus oraciones sinceras?

Se trata de la madurez Cristiana que lucha con la carga de la sinceridad, lo espiritual, con oraciones aún sin contestar.

Nosotros vemos la profundidad de este problema espiritual en la vida del apóstol Pablo. Está en el contexto de su deseo de exaltar a Cristo en cada ocasión que él apenas menciona la última experiencia Cristiana y luego sólo una vez después de que esto ocurrió catorce años antes. ¡¨Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera"!  (2 Corintios 12:7).

Pablo oró  que  Dios tomaría "  el aguijón en la carne " lejos permanentemente. Él oró con seriedad. Él oró repetidamente.

"Concerniente a  esto," Pablo dice, " Respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí " (2 Corintios 12:8). " Tres veces " es una figura  de expresión Hebrea que indica sin cesar, continuamente, una y otra vez orando, "  que esto pudiera apartarse de mí."

¿Ha tenido usted  esta clase de experiencia? Pablo oraba por  la cosa correcta; él estaba orando de la manera correcta, y a la persona correcta. ¿Por qué no le contestó Dios de la manera que Pablo deseo?

La gran lección que Pablo aprendió fue que Dios tenía un  propósito mayor en su sufrimiento. Jesús le dijo a Pablo, " Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo" (2 Corintios 12:9). Pablo aprendió a ser humilde y en " la jactancia sobre mis debilidades, que el poder de Cristo pueda morar en mí " (2 Corintios 12:10).

La oración necesita cambiarnos antes de que esta cambie nuestras circunstancias. El punto primario de Dios  es conformarnos a la semejanza de Cristo.  

¿Está tratando Dios de enseñarle una gran lección  por decir "No" a su oración? Él puede tener otro trabajo para que usted haga  y que nadie más puede hacer en Su reino; justo  donde usted está en sus circunstancias insoportables. O Él puede decir que no somos necesarios donde nosotros vemos la mayor necesidad, pero Él ya tiene a alguien  preparado y disponible que Él quiere allí. Él está contestando nuestras oraciones por  alguien más que Él ha escogido. Todo lo que realmente importa es que Él consiga toda la gloria. Quizás nos hemos hecho el centro del escenario y Dios tiene que dejarnos de lado temporalmente. Él no tiene que usarnos como Sus agentes escogidos. O puede ser que Él quiere mantenerle justo donde usted está en sus circunstancias de modo que cierta persona oirá las buenas noticias de Cristo y sea salva.

Usted puede estar en el centro de una gran batalla espiritual y usted no es aún consciente de lo que está pasando. El "aguijón en la carne" de Pablo "era un mensajero de Satanás" para atormentarlo. No podemos ver la guerra espiritual, pero es muy verdadera y esto afecta nuestra vida de oración. Jesús dijo que nosotros "siempre deberíamos  orar y no rendirnos."

Dios contesta  la oración diciendo "sí", "no", "espera" o en una manera completamente diferente que nunca esperamos.

A veces Dios no contesta porque tenemos el pecado  sin confesar en nuestras vidas (Isa. 59:1-2; Ezequiel. 14:3; Prov. 21:13). ¿Está usted secretamente manteniendo algún pecado, o  un ídolo? "Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, El Señor no me habría escuchado" (Sal. 66:18).

A menudo la incredulidad cierra la puerta (Santiago. 1:6-7). ¿Por qué debería Dios contestar nuestras oraciones positivamente si no creemos en Su Palabra incondicionalmente?

El apóstol Santiago dijo que pedimos con los motivos incorrectos (Santiago. 4:2-3).

La oración es un trabajo duro. Quizás somos espiritualmente perezosos. Dios no bendecirá una vida de oración perezosa e inconsistente (Santiago. 5:16-18).

"La oración eficaz de un hombre justo puede lograr mucho." Oremos... 

Selah!

Mensaje por Wil Pounds (c) 2009 traducido por Katia Blandin