Consecuencias de la Incredulidad
El
escritor del evangelio de Lucas describe a Zacarías
y Elizabeth, como una pareja de ancianos ", ambos de
edad avanzada," y sin hijos. "Isabel era estéril."
Zacarías era un sacerdote que se casó con una mujer
de descendencia sacerdotal. "Ambos eran justos
delante de Dios, y andaban irreprensibles en todos
los mandamientos y ordenanzas del Señor" (Lucas
1:6).
Zacarías
tuvo el honor "de entrar en el templo del Señor y
quemar incienso" (v. 9). "Y toda la multitud del
pueblo estaba fuera orando a la hora del incienso"
(v. 10).
Fue un
momento muy especial para el sacerdote de edad
avanzada. Él y su esposa habían orado con frecuencia
por muchos años por un hijo que extendiera su
apellido, y llenar sus vidas con alegría.
Imagínese
como fue ese día en el templo cuando "se le apareció
un ángel del Señor puesto en pie a la derecha del
altar del incienso" en el Lugar Santo (v. 11). "El
miedo se apoderó de" Zacarías, mientras escuchaba al
ángel.
"Zacarías,
no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer
Elisabet te dará a luz un hijo, y
llamaras su nombre Juan. Y tendrás gozo y alegría, y
muchos se regocijarán de su nacimiento" (vv. 13-14).
Dios
respondió las oraciones de esta pareja justa en la
manera más impresionante. Pero no fue un mensaje de
importancia sólo para esta humilde pareja, era una
palabra importante para el pueblo de Israel.
"Porque
será grande delante de Dios, no beberá vino ni
sidra, y será lleno del Espíritu Santo, aun desde el
vientre de su madre. Y hará que muchos de los hijos
de Israel se conviertan al Señor Dios de ellos" (vv.
15-16, cf. v.41). Dios ha escogido a este niño para
un propósito especial. Tendrá una especial unción
del Espíritu Santo ", aún desde el vientre de su
madre," y su mensaje será el instrumento de Dios
para traer una restauración en la nación.
Su
presencia recordara a la gente
"con el espíritu y el poder de Elías" y su mensaje
será utilizado "para preparar a un pueblo" para la
venida del Señor (v. 17). Este niño por nacer
preparara el camino para la venida del Mesías.
¡Dios
contesta las oraciones! Él hace lo imposible. Él
lleva a cabo sus propósitos eternos de la manera más
sorprendente. "Después de aquellos días, su esposa
Isabel quedó embarazada. . . " (v. 24). No fue un
nacimiento virginal, sino una concepción natural.
Elizabeth quedó embarazada. Qué hermoso.
¿Cuál fue
la reacción del padre cuando el mensajero de Dios
trajo la buena noticia? "¿En qué conoceré esto?
Porque yo soy viejo, y mi mujer es de edad avanzada"
(v. 18).
Era
suficiente que Dios dijo que Él estaba respondiendo
a las oraciones de Zacarías. Gabriel acababa de dar
a Zacarías la evidencia. La palabra de Dios es una
razón suficiente.
Cuando
llegó la respuesta, Zacarías se quedó atónito y
lleno de asombro. Él no esperaba que Dios contestara
sus oraciones, porque una secreta incredulidad se
ocultaba lejos en su corazón. Dios es fiel, y Su
fidelidad constante revela nuestra fe vacía y
superficial. Cuando la respuesta llegó, !Zacarías no
podía creerlo!
Cuando
Dios contesta nuestras oraciones a menudo nosotros
somos sorprendidos y llenos de asombro. Al igual que
Zacarías, hemos escuchado las promesas y hemos
pedido a Dios en oración sincera, y cuando Dios dice
que sí, nosotros somos sorprendidos. Las bendiciones
de Dios no son desconocidas para nosotros. El ángel
le dijo: "tu oración ha sido oída." Los propósitos
de Dios se están cumpliendo en ti.
Zacarías
quería una señal. ¡Él quería un vellón, y lo
consiguió! Gabriel estaba molesto con la
incredulidad de Zacarías. "Y ahora quedarás mudo y
no podrás hablar, hasta el día en que esto se haga,
por cuanto no creíste mis palabras, las cuales se
cumplirán a su tiempo" (v. 20).
¡Zacarías
no hablo ni una palabra por nueve meses! ¿Y si Dios
hizo lo mismo a ti y a mí en nuestra incredulidad?
¿Cuánto tiempo permaneceríamos en silencio?
¿Tentamos a Dios de una manera similar? ¿Qué
garantías vamos a pedir cuando Dios habla? ¿Vamos
nosotros "en busca de circunstancias de algún minuto
para verificar una magnífica promesa"? ¿Hacemos
nuestros sentimientos una especie de prueba de
nuestra aceptación de la palabra de Dios? No creeré
a menos que ____? ¿Qué? ¿Por qué debería Dios
tolerar nuestra incredulidad y castigar a Zacarías?
¿Qué ha hecho Dios para castigar su incredulidad? Y
si Dios lo dijo a usted o a mí,
"¿Esa es la manera que usted testifica de mi
fidelidad, usted no hablara de nuevo"? Dios también
tenga misericordia de su siervo por nosotros, como
Zacarías. Gracias a Dios, "Si no creemos, sin
embargo, Él permanece fiel; El no puede negarse a sí
mismo".
Zacarías
no podía bendecir a la gente que esperaba con
ansiedad fuera de la bendición. Él no podía hablar
ni una palabra. Él no podía dar ninguna instrucción,
o una palabra de alabanza, o incluso decirles lo que
Dios le ha dicho a él. Él era un siervo inútil. Era
como si estuviera muerto durante nueve meses hasta
que nació su hijo Juan el Bautista.
Después
del nacimiento de Juan, Dios soltó su lengua, y
derramó alabanza a Dios y profetizó bajo el poder
del Espíritu Santo (vv. 64-79). Que el Dios de la
gracia suelte nuestra lengua también.
Selah!
Mensaje por Wil Pounds (c) 2009 traducido por Katia
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