En una discusión acalorada con un grupo hostil de líderes religiosos Jesús dijo, " Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó" (Juan 8:56).

En su prisa de reaccionar con entusiasmo emocional, ellos no estaban prestando atención a lo que Jesús dijo, ellos concluyeron, " Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?" (v. 57).

En respuesta a su pregunta, Jesús hizo una de las declaraciones más profundas acerca de Su deidad. "De cierto, de cierto os digo:

¿Quién es este hombre? ¿Es Él Dios? ¿Quién es este "YO SOY"? ¿Quién es Jesucristo?

No hay error, Jesús estaba afirmando haber existido antes de que el patriarca judío Abraham naciera. Estaba afirmando una preexistencia eterna-"Antes que Abraham fuese, yo soy".

Cuando Jesús usó el nombre "YO SOY" Él realmente estaba usando el nombre divino por el cual el Dios de Israel se había revelado a Moisés en la zarza ardiente (Éxodo 3:13-14). Dios se reveló a Moisés como "Yo soy el que soy". "YO SOY" es el nombre para Dios que Jesús toma para sí mismo. Con este nombre para la deidad, Él afirmo ser el Señor que es la palabra misma para Jehová o SEÑOR.

Los judíos escuchando a Jesús inmediatamente reconocieron Su afirmación de ser Dios. Los líderes judíos sabían lo que Jesús estaba diciendo. Ellos claramente entendieron Su discurso. Porque ellos eran tan inferiores,  recogieron piedras para matarlo por blasfemia.

Esta no fue la única vez que Jesús, directa o indirectamente afirmó ser igual a Dios.

Jesús dijo, " No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir." (Mateo 5:17). Todo lo que Jesús enseñó referente al Antiguo Testamento está relacionado indirectamente a Su afirmación de la deidad. Lucas 24:25-27, 45-47 hace muy clara esta afirmación de Jesús.

Cuando Jesús perdonó los pecados, Él estaba muy consciente de que Él estaba afirmando hacer lo que sólo Jehová puede hacer. Como Dios, Él afirmo ser capaz de enviar el Espíritu Santo de Dios para morar en Sus seguidores.

Pero incluso Jesús afirmo una relación única con el Padre celestial. Ningún judío en la época de Jesús habló de Dios directamente como "mi Padre." Jesús claramente fue la excepción. Él afirmo una relación exclusiva con el Padre.

"Yo y el Padre uno somos. " (Juan 10:30). Debido a Su relación única con el Padre, Él enseñó a Sus discípulos a referirse al Padre como "Padre nuestro que estás en los cielos."

Además, Jesús comparo la actitud de una persona hacia Él como su actitud hacia Dios. Conocerle a Él era conocer a Dios el Padre (Juan 8:19, 14:9, 16-17). Ver el rostro de Jesús era ver a Dios (Juan 12:45; 14:9). Confiar en Él era creer en Dios (Juan 12:44; 14:1). Rechazarlo a Él  era rechazar a Dios y su ofrecimiento de vida eterna (Juan 15:23; 1 Juan 4:15). Adorarle a Él era honrar y adorar a Dios el Padre (Juan 5:23; 1 Juan 4:2-3).

En última instancia tu respuesta a la pregunta "¿Quién es Jesucristo?" Determina dónde tú pasarás la eternidad.

Si Jesús es Dios, Él tiene derecho a mi lealtad. Si no, yo bien puedo darme el lujo de no prestarle atención. ¿Pero si Jesús es realmente Dios? Entonces usted no puede permitirse el lujo de ser indiferente. Él no nos deja con esa opción.

¿A quién servirá, a Cristo o a usted mismo?

 Si es a usted mismo, usted puede ganar todo el mundo, pero perderá su propia alma en el infierno.

¿Ha respondido: "Señor mío y Dios mío!"? ¿Es Él tu ¡Adonai! !Elohim! ¡Yahvé! ¡Jehová! SEÑOR?

¿Qué decide usted hacer con Jesús?

Selah!

Mensaje por Wil Pounds (c) 2009 traducido por Katia Blandin