¿Cómo puedo saber yo que Dios ha aceptado completamente la muerte de Jesucristo como pago por mis pecados?

"Cuando Jesús murió, Él murió como mi representante, y yo morí en Él; cuando Él resucitó, Él resucitó como mi representante, y yo resucité en Él.... Miro la cruz de Cristo, y sé que la expiación ha sido hecha por mis pecados; miro el sepulcro abierto y al Señor resucitado y ascendido, y sé que la expiación ha sido aceptada. Allí no  existe un solo pecado  en mí, no importa cuántos o que tan grandes mis pecados puedan haber sido. Mis pecados pueden haber sido tan altos como las montañas, pero en la luz de la resurrección la expiación que los cubre es tan alta como el cielo. Mis pecados pueden haber sido tan profundos como el océano, pero en la luz de la resurrección la expiación que los traga es tan profunda como la eternidad" (R. A. Torrey, La Biblia and Its Cross, pp. 107-08).

La resurrección de Jesucristo es la prueba que Dios el SEÑOR ha aceptado el pago  completo por nuestros pecados en la muerte de Su Hijo. Dios está totalmente y completamente satisfecho con el trabajo  de expiación que Jesús hizo sobre la cruz por mis pecados porque Él lo levantó de la muerte.

La resurrección de Jesucristo demuestra que cada creyente en Cristo es justificado por la fe, y limpiado por Su sangre de todos sus pecados (Heb. 12:1-2; Fil. 2:8-11). Esta es la prueba de Dios mismo que la pena por nuestros pecados ha sido pagada por completo por la muerte de Jesucristo. Por la resurrección de la muerte de Jesús, Dios declaró que Él ha aceptado la muerte de Jesús como una expiación por nuestros pecados.

¿Cree usted "en Él que levantó a Jesús nuestro  Señor de la muerte"? (Romanos 4:24). Jesús "el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación" (Rom. 4:25). Dios el Padre envió a Jesús a la cruz para morir por nuestros pecados (Hechos 2:23), "y Dios lo levantó de nuevo" (Hec. 2:24). "A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos," declaro Pedro (Hec. 2:32). La muerte de Jesucristo  fue según el plan  determinado por Dios para lograr nuestra redención. Jesucristo es "el Cordero de Dios  inmolado de la creación del mundo" (Apocalipsis 13:8).

Además, Jesús deliberadamente decidió morir como nuestro sustituto. Él "murió por nuestros pecados." Él murió en nuestro lugar sobre la cruz como nuestro portador de pecados.

El hecho de que somos pecadores es la prueba de que merecemos morir. "La paga del pecado es la muerte." Merecemos la condenación eterna, pero Jesús fue entregado por Su Padre por nuestras transgresiones. Él fue crucificado por nuestros pecados.  Yo merezco el infierno, pero Jesús tomó mi infierno y  tomó la sentencia de muerte en mi lugar (Rom. 5:6, 8). Tenemos redención por Su muerte (1 Pedro. 1:18-19).

¿Cómo sabemos esto como un hecho? ¿Por qué debemos poner nuestra confianza en Su muerte? ¿Cómo podemos  saber con seguridad que la muerte de Jesucristo es totalmente suficiente para cubrir todos nuestros pecados? "Él fue entregado por nuestras transgresiones, y fue levantado por nuestra justificación." Esta es toda la prueba que yo necesito. La resurrección es la prueba de Dios, que Él acepto la muerte de Jesús en mi lugar. Jesús está vivo.  Porque sé que más allá de una duda,  que el pago completo por mis pecados ha sido hecho.

Tales pruebas como estas exigen que nosotros respondamos a Dios por la fe en Jesucristo (Rom. 10:9-10, 13).  Fue por Su sustituta, vicaria muerte que Jesús desvió la ira de Dios y se convirtió en la base sobre la que Dios es capaz de justificar al pecador que cree.

"Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quién también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos con la esperanza de la gloria de Dios" (Romanos 5:1-2). 

Selah!

Mensaje por Wil Pounds (c) 2009 traducido por Katia Blandin