La única manera de vivir la vida cristiana es por la provisión divina. Jesús dijo: "Mas buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas” (Mateo 6:33).

El apóstol Pablo escribió: "Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él" (Colosenses 2:6).

"Por tanto, de  la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo..."

¿Cómo le recibió? Hay una sola manera enseñada en las Escrituras. Es por la gracia mediante la fe en Cristo (Hechos 4:12).

Phillips traduce Colosenses 2:6, "Así como usted recibió a Cristo, siga viviendo en Él – una fe simple."

El apóstol Juan dijo: "Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios" (Juan 1:12, RV 1960).

Usted recibe a "Jesucristo el Señor" por creer en Su nombre. "Mas a todos los que le recibieron a los que creen en su nombre." Tener fe en Él es recibirlo.

¿Tiene esa actitud de fe y confianza en Jesucristo? La fe indica una relación con Cristo como Salvador. Es la sumisión a Su Señorío como Rey de nuestras vidas y la confianza en Él como nuestro sumo sacerdote. ¿Conduzco mi vida en sumisión al rey de mi vida?

¿Ha recibido usted a Jesucristo el Señor? "Jesús" es el nombre dado a Él en Su nacimiento significa "Yahvé salva", "Jehová salva". Por eso, el apóstol Pedro declara porque no hay otro nombre dado a los hombres en que podamos ser salvados (Hechos 4:12). Llamando a todos los otros nombres para la salvación eterna le enviará a un infierno eterno. Hay salvación y vida eterna sólo en Jesucristo. Jesús es el Salvador que vino a esta tierra para morir por nuestros pecados y nos da el tipo de vida de Dios. Jesús dijo, "Yo soy el camino, y la verdad, y la vida, nadie viene al Padre sino es por mí" (Juan 14:6). "El que me ha visto ha visto al Padre" (v. 9).

Este mismo ¨Jesús¨ de Nazaret es el Mesías, el ungido Rey y Sumo Sacerdote. El Mesías para el pueblo Hebreo era el Rey - Sacerdote. Él es el que reina como soberano sobre nuestras vidas y el que intercede por nosotros. El Rey es también el sacerdote. El Rey que tiene la autoridad suprema es también el Sacerdote que ofrece el único sacrificio perfecto de sí mismo en nombre de Su pueblo.

Este mismo Jesús "de Nazaret es el Mesías, el ungido rey y Sumo Sacerdote. El Mesías para el pueblo hebreo era el Rey - Sacerdote. Él es el que reina como soberano sobre nuestras vidas y el que intercede por nosotros. El rey es también el sacerdote. El Rey, que tiene la autoridad suprema es también el sacerdote que ofrece el único sacrificio perfecto de sí mismo en nombre de su pueblo.

¿Se ha convertido Jesucristo en su Señor? "Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra " (Filipenses 2:9-11, RV 1960). ¿Se ha inclinado a ese nombre?

Si usted nunca le ha "recibido" a Él como "Jesucristo el Señor," usted no puede "andar en él". ¿Tiene usted este tipo de relación con Él? ¿Ha rendido su alma a Él?

La comparación que el apóstol está sacando en Colosenses 2:6 es el hecho de que nosotros hemos sido salvados por la gracia mediante la fe es de la misma manera en que vivimos la vida cristiana. Nosotros somos salvos y sostenidos por el mismo tipo de fe en nuestro Señor.

"Así como usted recibió a Cristo, siga viviendo en Él – una fe simple."  Taylor parafraseo, "Y ahora, al igual que usted confía en Cristo para ser salvo, confíe en Él también para los problemas de cada día, viva en unión vital con Él".

La palabra "andar" (peripateo) es figurativo de "la caminata de la vida", o su conducta en la vida. Haga al Señor Jesucristo verdaderamente "Señor" y el capitán de cada día de su vida. Mantenga una comunión personal con Cristo, su vida depende de ello. Nosotros debemos dirigir nuestra vida como hombres y mujeres que se han unido con Cristo, nuestra vida se deriva de Él. Debido a esta relación viva con Él, nosotros estamos conduciendo nuestras vidas, en dependencia de Él (Juan 15:5).

Así como usted lo ha recibido, sigue andando en él.

Selah!

Mensaje por Wil Pounds (c) 2009 traducido por Katia Blandin